Ahora te compartimos algunos tipos de estrategias financieras que las empresas utilizan. Aunque existen diversas opciones, estas varían según el momento y los objetivos. No obstante, las siguientes son las más comunes.
Estrategia de inversión
Este tipo de estrategia busca invertir en opciones que generen ganancias a la empresa. Esto, usualmente, se logra mediante instrumentos financieros como fondos de inversión, acciones, bonos del estado o materias primas que, por lo general, involucran un periodo a largo plazo y que significarán un retorno de capital superior a la inversión inicial.
Fondo de maniobra
El fondo de maniobra se refiere a los recursos que un negocio tiene para cubrir sus gastos fundamentales. Esta estrategia pretende consolidar la situación financiera al aumentar los activos de una empresa (inmuebles, caja, inventario) y reducir los pasivos (deudas y obligaciones).
Estrategia de costes
Una estrategia de costes se caracteriza por reducir costos de operación y hacer más rentable un negocio. Para lograrlo, esta revisa la estructura actual de los procedimientos y los presupuestos o la automatización de algunos procesos para mantener la calidad de los productos y servicios, a un menor costo.
Gestión de riesgos
Otra estrategia común es la de riesgos, la cual se enfoca en identificar, gestionar y minimizar aquellos factores internos y externos que afecten la gestión y organización de la empresa. Así, el cumplimiento de objetivos no estará en juego. Aunque es posible prevenir gran parte de los riesgos, esta estrategia también ofrece formas de mitigar y hasta encontrar oportunidades en ellos.